Tecnológicamente hablando, si algo nos enseña el confinamiento es que el teletrabajo no sólo es posible, sino que es un modelo de comportamiento que ha llegado para quedarse.

Esto implica un cambio de paradigma en los planes de transformación digital que tuvieran diseñados las empresas. Las amenazas en la red han aumentado y el objetivo se ha centrado en la parte más vulnerable: los equipos y conexiones remotas. Otro aspecto que genera inquietud es la seguridad de los productos de teleconferencia: Teams, Skype, Zoom, etc.

¿Cómo debemos afrontar este nuevo escenario? ¿Estamos preparados ante el reto que la ciberdelincuencia puede ocasionar? ¿Qué impacto puede tener en nuestro negocio un ataque a nuestro sistema?

Éstas y otras cuestiones son las que intentaremos dar respuesta desde un punto de vista más práctico y funcional que técnico con ejemplos que podamos trasladar a nuestro día a día